Sunday, 22 October 2017

MUJER POLICIA VIOLA A DEFENSORA DE DERECHOS DE LAS MUJERES

NOTA DEL BLOG: SIN COMENTARIOS ....

Mujer polic?a de Tlapa, Guerrero viola a defensora de los derechos de las mujeres


 ACTIVISTA Yndira Sandoval S?nchez fue violada por mujer policia


Los hechos ocurrieron el pasado 16 de septiembre, cuando atend?a su cita en la Universidad Aut?noma de Guerrero, a donde iba a dar una conferencia para promover acciones para la prevenci?n, detecci?n, atenci?n, sanci?n y erradicaci?n de la violencia contra las mujeres.

Regeneraci?n, 22 de octubre de 2017.-En una celda de la c?rcel municipal de Tlapa de Comonfort, en Guerrero, a donde fue a dar una conferencia sobre violencia de g?nero, la activista y defensora de los derechos de las mujeres Yndira Sandoval S?nchez, fue agredida por una polic?a, que asever?: ?Te dije que te ibas a chingar?, as? le dijo la polic?a Claudia Ju?rez G?mez mientras la somet?a con una rodilla encima, as? lo informa el diario La Jornada.
En esos momentos Yndira pens? que iba a morir, la mujer polic?a le manose? los senos y le baj? el pantal?n: Me penetr? con sus dedos, me lastim? mucho. Luego me solt?, me avent?, me pate?, mientras otra mujer polic?a, c?mplice, vigilaba la entrada a la celda. Yo ya no sab?a qu? segu?a despu?s de la tortura.

De acuerdo con informaci?n recopilada por la periodista Sanjuana Mart?nez, los hechos ocurrieron el pasado 16 de septiembre, cuando atend?a su cita en la Universidad Aut?noma de Guerrero, a donde iba a dar una conferencia para promover acciones para la prevenci?n, detecci?n, atenci?n, sanci?n y erradicaci?n de la violencia contra las mujeres, a trav?s de Todas Mx, movimiento que dirige en favor de los derechos de este sector de la poblaci?n.
Jam?s pens? que ella misma ser?a la v?ctima: ?El hecho que sea una mujer mi agresora, me hace confirmar que nuestros enemigos no son los hombres: es el machismo, es el sistema, es el patriarcado, son las pr?cticas, es el Estado con rostro de hombre o con rostro de mujer?
UNA PESADILLA
Por esto se interpuso una denuncia el 17 de septiembre ante la Fiscal?a General de Guerrero, en la Unidad de Investigaci?n 1 Especializada en Delitos Sexuales y Violencia Familiar Regi?n Monta?a, con la carpeta n?mero 12080470200090170917, y el 13 de octubre ante la Procuradur?a General de la Rep?blica (PGR), con la c?lula de investigaci?n de la agencia tercera de la Fiscal?a Especial para los Delitos de Violencia contra las Mujeres y Trata de Personas (Fevimtra) y la carpeta FED/SDHPDSC/FEVIMTRA-GRO/0000634/2017.
Yndira recuerda que estando en Tlapa de Comonfort se accident? con un clavo, que le rompi? su camisa del costado izquierdo debajo de su axilia, lastim?ndole una zona cercana a su seno, por lo que decidi? acudir con su compa?ero a la Cl?nica San Antonio, donde la atendi? el m?dico.
El m?dico que la atendi? le cobr? primeramente la cantidad de 2 mil pesos y luego ante la insistencia, le baj? el costo del servicio a 900 pesos, pero le dijo que no aceptaba tarjeta, por lo cual ten?a que buscar un cajero para regresar y pagarle a ?l mismo sin pasar por caja. Le dije entonces que le pagar?a, pero que requer?a un recibo y una factura del servicio.

Sali? del lugar pero record? que olvid? su celular, por lo que regres?, al salir observ? que hab?a una camioneta con seis elementos de la polic?a municipal de Tlapa de Comonfort que intentaban detener a su compa?ero, porque supuestamente se hab?an negado a pagar la cuenta de la cl?nica.
?Por qu? lo detienen? Soy defensora de derechos humanos, les dijo, y un agente le contest?: usted tambi?n est? detenida. Fue entonces cuando exigi? aplicar el protocolo para que en lugar de un hombre, la revisara una mujer polic?a, que de mala gana le grit?: ?C?llate, pendeja!, neg?ndose a dar su nombre.
?Te vale madre qui?n soy, ya te dije que calles y aqu? en Tlapa te chingas?.
La activista contin?a el relato: ?Como me negu? a subir a la patrulla, la oficial me avent? hacia el interior de la batea de la camioneta y aunque le dije que estaba lastimada, se empe?? en apretarme la herida, tortur?ndome f?sica y sicoemocionalmente. Todo el trayecto hacia la comandancia municipal me tuvo de rodillas, jal?ndome el cabello hacia atr?s, apret?ndome la herida y me preguntaba, ri?ndose: ??Te duele???.
La polic?a, quien luego fue identificada como Claudia Ju?rez G?mez, le espet? mir?ndola a los ojos: ?Aqu? te vas a chingar, aqu? valen verga tus derechos, aqu? te chingas, pinche g?erita pendeja, aqu? estas en Tlapa y te voy a ense?ar qui?n manda?.
La metieron en la primera celda ubicada en un pasillo, mientras una polic?a vigilaba desde la puerta, la otra, identificada como Claudia Ju?rez G?mez, la agarr? violentamente del cabello y la puso contra la pared: ?Con su brazo derecho me someti? hasta ponerme de rodillas, me tap? la boca y me empez? a tocar mis senos, hasta que lleg? abajo, desabrochando mi pantal?n e introduciendo su mano izquierda debajo de mi pantaleta tocando mi ?rea vaginal, penetr?ndome violentamente con sus dedos. La violaci?n dur? unos cinco minutos, pero se me hizo eterno, y todo el tiempo estuvo dici?ndome al o?do: ?te dije que te ibas a chingar, te dije que te callaras, pendeja??.
Yndira lloraba, pero sus gritos no se escuchaban, porque ten?a la boca tapada. Sinti? que algo peor ocurrir?a y confirm? que al ser tan vulnerable incluso pod?an desaparecerla o asesinarla. Prefiri? el silencio. Las dos polic?as salieron de la celda, ella se qued? tirada sin poderse mover, aterrorizada.
Minutos despu?s un polic?a lleg? y le dijo que quedaba libre y pod?a irse. Nunca firm? un documento de entrada ni de salida de la c?rcel municipal. La pesadilla todav?a no terminaba.


El viacrucis: burlas y violencia de servidores p?blicos
Ella esta acostumbrada a rescatar v?ctimas de violencia, por esto Yndira utiliz? todos los protocolos que conoce y que jam?s pens? le servir?an a ella misma para defenderse de una agresi?n.
Por primera vez en su vida vivi? el viacrucis que padecen las mujeres violentadas sexualmente. Y sufri? el rechazo, las burlas, la indefensi?n ante servidores p?blicos que carecen absolutamente de visi?n de g?nero a pesar de representar a instituciones que se supone est?n para defender la integridad y la seguridad de las mujeres.
Primero fue a la Fiscal?a Especializada de Delitos Sexuales de La Monta?a, que se ubica en la calle Guerrero, n?mero 122. Estaba cerrada, sin guardia. Lo document? haciendo que le tomaran unas fotos para despu?s poder comprobar sus dichos.
Despu?s fue a la oficina del agente del Ministerio P?blico, que se identific? solamente como el Lic Valente, para interponer una denuncia por violaci?n sexual, privaci?n ilegal de la libertad y abuso de poder, y el funcionario le contest? que no pod?a levantar ninguna denuncia y a continuaci?n cerr? la ventanilla y apag? las luces.
Yndira se dio cuenta que hab?a uniformados tom?ndole fotos y videograband?la desde una patrulla que la segu?a. Finalmente decidi? irse a dormir y al d?a siguiente continuar con los tr?mites de las denuncias: No dorm? ni me ba?? porque ning?n m?dico legista me hab?a revisado para darme el dictamen m?dico.
Afuera de la fiscal?a se encontraba el director de Seguridad P?blica de Tlapa, Javier Rivera Fierro, queriendo hablar, y ella le dijo: ?No s? qui?n seas, pero por tu cargo, t? eres el responsable de lo que me sucedi? anoche, as? que ret?rate porque no entiendo qu? haces en la fiscal?a. Tu presencia es una intimidaci?n m?s?.
Acto seguido, la fiscal Osbelia Blanco Mart?nez le abri? la puerta de la oficina y le dijo: ?T? eres la de la violaci?n? Yndira contest?: ?perd?n? ?C?mo lo sabes? Y las fiscal a?adi?: me lo dijo el Ministerio P?blico en turno de la noche. El mismo funcionario que se neg? a recibir su denuncia.
La fiscal argument? que no contaba con personal para hacer los dict?menes, m?dicos, sicol?gicos ni toxicol?gicos. Yndira tuvo que esperar horas y hasta un d?a m?s para documentar lo que le hab?an hecho. El qu?mico que finalmente la atendi? le hizo una advertencia: Est? usted consciente de que si en su examen aparecen restos, muestras o residuos de sustancias que usted no haya declarado, se puede ver perjudicada. Ella le dijo que si as? suced?a, eso no era delito; en cambio, lo que le hab?an hecho, s?.
Para el examen sicol?gico fue citada el 18 de septiembre, dos d?as despu?s de la agresi?n, por Karen Denisse Ram?rez. Mientras esperaba afuera de su oficina, escuch? un veh?culo con perifoneo que con voz alarmista anunciaba la noticia distorsionada publicada en un pasqu?n llamado Interdiario, el ABC en La Monta?a: Vergonzoso sainete protagonizado por la hija de una diputada local. La mentira con su foto, seguramente entregada por los polic?as, la conmocion?.


?Entre en crisis, me aterraba el hecho de ir descubriendo el nivel de colusi?n y complicidad de las autoridades, dice llorando. La sicol?ga no aplic? el protocolo y la recibi? con una terrible pregunta: ?Qu? sentimiento te invade por el hecho de estar en Tlapa impartiendo una charla contra violencia y haber sido violada durante tu estancia??.
Para obtener el dictamen m?dico, Yndira tuvo que trasladarse a las instalaciones del Issste, donde la recibi? Rogelio H. P?rez Laurel: ??S? sabes que si no encuentro nada ah? (se?alando la vagina) la que se va a ir a la c?rcel eres t???, y luego a?adi? en tono de mofa: ?Ya c?lmate y desv?stete, no tengas pena, aqu? todas somos mujeres, incluy?ndome?.
El examen con referencia a las manecillas del reloj arroj? laceraciones y lesiones de manipulaci?n e irritaci?n aguada: ?a la 1 a las 3 a las 6 , a las 9 y 12?, y luego consign? las lesiones en brazos, antebrazos, pantorrillas, rodillas y muslo derecho, as? como en espalda y la ingle.
Los protocolos fueron cumplidos gracias al conocimiento de la v?ctima, y a pesar de las instituciones, pero Yndira acaba de empezar la lucha para el acceso a la justicia. Y como respuesta, su casa fue allanada y fue amenazada de muerte, por lo que se acogi? al mecanismo de protecci?n y ahora vive bajo el cuidado de escoltas.
Entre lagrimas, advierte con enorme fortaleza que seguir? buscando justicia, incluso ante la Comisi?n Interamericana de Derechos Humanos (CIDH):
?El hecho que me violara una mujer me confirma que nos est? carcomiendo el propio sistema, que normaliza la violencia y nos quiere obligar a pensar que este es nuestro destino. Las instituciones est?n podridas. Quiero caminar sin miedo; el Estado me pudo haber quitado la seguridad, pero no me va a quitar ni la dignidad ni mi vocaci?n de seguir defendiendo los derechos de las mujeres?, finaliz?.

0 comments:

Post a Comment